Actualmente, el cuidado y desinfección de objetos de uso común se ha intensificado, es por esto que te explicamos las medidas adecuadas para el correcto mantenimiento de tus candados y llaves. Por sus materiales, puedes aplicar estos consejos, también, en tus cerraduras y extender la vida útil de tus productos de Seguridad.
Un candado en servicio está expuesto al polvo, a partículas y a sustancias químicas en suspensión las cuales se depositan y acumulan en su interior. Estas, con el paso del tiempo, crean fricción dentro de los componentes del sistema interno y en el cilindro, impidiendo en algunas ocasiones el normal funcionamiento de la llave y afectando directamente el sistema de apertura y cierre del mecanismo.
Es recomendable que los candados sean sometidos a limpieza y mantención por lo menos una vez al año. En ambientes más agresivos como bordes costeros, inmediaciones de ambientes corrosivos industriales o de mucha exposición al polvo, se deben limpiar con mayor frecuencia, realizando un mantenimiento cada 6 meses.
A continuación, te mostramos los químicos más utilizados a la hora de desinfectar distintos elementos y cuáles debes o no usar en tus Candados y llaves.
✔ ALCOHOL ISOPROPÍLICO: Es un producto cuyo poder desinfectante es extremadamente efectivo; no obstante, a la hora de utilizarlo para limpieza del hogar hay que matizar que el alcohol que se utiliza en limpieza no es el mismo que utilizamos para desinfectar cortes o heridas. El alcohol para desinfectar una herida es el etílico; si, el mismo que contienen las bebidas alcohólicas; mientras que el alcohol que utilizamos para realizar trabajos de limpieza es alcohol ISOPROPÍLICO. Al aplicarlo, no es necesario secar después.
✘ CLORO: Produce desgaste en los objetos de hierro, incluso, en elementos de acero inoxidable. Esto es debido a que el cloro es un elemento que al combinarse con agua se vuelve extremadamente corrosivo. No recomendamos usarlo como desinfectante para los Candados ni para las llaves.
✘ AMONIO CUATERNARIO: Es un limpiador desinfectante que tiene un amplio espectro de eliminación de microorganismos como virus, bacterias, hongos y esporas. Tiene un importante efecto residual por lo tanto permanece activo conservando sus propiedades por mucho más tiempo. Actualmente, se ocupa para la sanitización del metro de Santiago y Hospitales. No lo recomendamos para la limpieza o desinfección de los candados. En caso de que sea su único elemento para desinfectar, sugerimos usarlo en un paño con poca cantidad y luego secar.
Conoce los pasos a seguir en nuestro Manual de Cuidados y Mantenimientos de Candados.